La red social profesional es muy
distinta a sus homólogas y para un correcto uso han de evitarse
comportamientos extendidos que impiden destacar como candidato.Tan importante como crear un perfil atractivo en esta red social
laboral, es no caer en errores tontos pero no por ello menos frecuentes
que pueden suponer la diferencia entre ser ignorado por alguien que
busca perfiles para un puesto de trabajo o entrar en el proceso de selección.
Para evitarlos, la experta en este terreno Nicole Williams ha revelado a LearnVest los errores más repetidos.
1. No poner fotografía
“Uno de los mayores errores que veo es no poner una foto. Tienes siete veces más oportunidades
de que tu perfil se vea si la pones” asegura Williams, antes de
compararlo con “una casa a la venta, donde se asume que si no hay foto,
algo no va bien”.
También indica que cuando se acude a un gran evento del que se sale con
muchos nombres que agregar a esta red, es más difícil recordar quién es
quién si no tienen fotografía. Prescindir de una fotografía podría
suponer perder un contacto.
2. Poner la fotografía equivocada
“Nada de perros, nada de maridos, nada de bebés” señala Williams. Las fotografías en LinkedIn deben dar una imagen profesional, no personal.
“Especialmente para las madres que se reincorporan al trabajo, una foto
de sus hijos no es conveniente si esperan conseguir un trabajo a tiempo
completo”, explica. Otro error es falsear la apariencia. “Veo a gente mayor preocupada por
ser discriminada por su edad usar una foto de cuando tenía 30 años, pero
un entrevistador no espera que se vea tan distinto y en lugar de
escuchar las respuestas, pensará que está ante un mentiroso” alega
Williams, quien considera que “a menos que vayas a ser contratado por
una empresa de modelos, la gente solo busca energía que
se puede mostrar con una buena postura, los ojos abiertos y una
sonrisa”. De hecho, un estudio de HSN Beauty reveló que un 19% de los
reclutadores solo miran la foto de perfil.
3. No poner el estado
Entre Twitter y Facebook, la gente sabe bien cómo es cada persona en el
ámbito social. Pero el estado de LinkedIn es el lugar correcto para anunciar los progresos
y logros profesionales. “Puedes actualizar sobre un compañero que ha
sido ascendido, o compartir un gran artículo que has escrito” sugiere
Williams. “Cada pocos días, pon algo en tu estado para mantenerlo
actualizado y muestra que eres activo y comprometido” aconseja, “porque
nadie sabrá lo que has conseguido si no lo cuentas”.
4. Utilizar la invitación de contacto predeterminada
“La gente cree que LinkedIn es como Twitter, donde importa más la
cantidad que la calidad, pero se supone que tienes que establecer
vínculos profesionales valiosos para optar a oportunidades laborales”
explica Williams.
Incluso cuando se solicita como contacto a alguien a quien no se
conoce, lo mejor es hacer una pequeña investigación sobre esa persona
para agregar algo a la invitación de contacto. “Personaliza tu mensaje para que el receptor lo note”, aconseja.
La gente que emplea LinkedIn correctamente quiere estar conectada a
gente que les aporte prestigio”, añade. “La gente que busca trabajadores
apreciará las conexiones, incluso decidirá contratar a alguien porque
conoce a gente de tal industria, lo que facilita llevar a cabo planes”
sentencia Williams.
5. Descuidar la configuración de privacidad
Mucha gente no sabe que LinkedIn tiene opciones de privacidad. “Cuando buscas un nuevo trabajo y todavía en activo en otro puesto, quieres ser discreto”
explica Williams. “Un síntoma revelador es que el usuario revisa su
perfil y tiene visitantes, pero se puede evitar que el jefe lo vea con
las opciones de privacidad”, asegura.
6. No escribir un resumen
Hacer un resumen laboral objetivo de uno mismo ha
pasado de moda en todos los sitios salvo en LinkedIn. “Desde que
escribes online, tienes más espacio del que tendrías en un CV de papel.
Piensa en el sumario como un modo de venderte, porque es una oportunidad
para hacerse oír y mostrar la personalidad” explica Williams.
Con gente de formación similar compitiendo por el mismo trabajo, el
resumen puede ser el detalle que haga que la balanza se incline hacia
uno u otro lado. Williams sugiere escribirlo en primera persona para añadirle fuerza y personalidad.
7. Obviar trabajos pasados o actividades voluntarias
Incluso cuando se ha cambiado de sector, el último trabajo no es el único importante.
“Al contrario que con el resumen, donde tratas de llevar el perfil a
una posición determinada, debes listar tu carrera laboral al completo en
LinkedIn”, asegura Williams, al considerar que “no sabes qué criterios
siguen para buscar a personas, por lo que necesitas que tu perfil sea
tan robusto como pueda”.
8. Fisgonear
Mucha gente piensa que tener un perfil es suficiente, pero no lo es. “Siempre recomiendo que los usuarios se unan a grupos relacionados con su actividad
o incluso con intereses personales” aconseja Williams, contando que
“cuando necesité una contable, me di cuenta de que había una en mi grupo
a la que acabé contratado porque conectamos al ser ambas madres
primerizas”.
LinkedIn también permite seguir a compañías y estar al
tanto de quién llega y quien se va. Si alguien deja una compañía a la
que un usuario se quiere unir, es la oportunidad perfecta para ponerse
en contacto con su departamento de recursos humanos.
Vía: www.intereconomia.com
Visítanos en: www.myuniversalmedia.com y hazte fan en: www.facebook.com/SocialUniversal
Síguenos en: www.twitter.com/@SocialUniversal
No hay comentarios:
Publicar un comentario